Flor de Sal, el secreto del gourmet

Pequeños detalles son los que marcan la diferencia en la mesa y los que generan interrogantes en los comensales. La pregunta está en el aire, ¿cuál es ese toque de calidad que tiene el lomo, la dorada a la sal o unas verduras asadas que se deshacen en la boca? Pequeños detalles como los cristalitos que componen la Flor de Sal capaz de enriquecer los platos de forma espectacular. El valor añadido que supone su alto contenido nutritivo hace que los grandes restauradores la tengan siempre presente en su cocina.

La Flor de Sal es la más pura de todas las sales, se obtiene mediante la aplicación de métodos de cultivo tradicionales, cuyo origen procede de la costa atlántica francesa. Su elaboración es completamente artesanal y es cultivada de forma natural y ecológica.  Es decir, llega desde las salinas al paladar sin que haya sufrido ninguna alteración.

Las sales marinas combinan diferentes tipos de cloruros como pueden ser el sodio, el magnesio, el potasio, el yodo, selenio o flúor. Esto es lo que le  hace tener un gran valor nutricional al ser rica en oligoelementos y minerales de los que contiene 80 esenciales.

En la mesa, la Flor de Sal consigue ensalzar cualquier receta en todos los sentidos. Es suave al paladar y de fácil disolución, de forma, que sus cristales se deshacen potenciando el sabor de los alimentos. No tiene olor y presume de un atractivo color blanco tirando a rosa pálido. Al tacto, se descubre que no se apelmaza como otras.

Este tipo de sal suele utilizarse en la última fase del emplatado, justo antes de servirse. Va muy bien con asados, salazones, horneados y plancha en pescados, carnes y verduras.

Estos mínimos detalles de calidad en la cocina se traducen en un mínimo precio de prueba ya que actualmente DOLIVA ofrece con un descuento promocional del 30 por ciento sobre los 7,90 euros que tiene de coste.

Flor de Sal se vende en bolsa de papel con 'ventanilla' en un práctico vasito de cristal para que siempre se mantenga húmeda. Contiene 90 gramos y se recomienda para su conservación que se mantenga en un lugar fresco, seco y aireado.