La sabiduría de los pueblos del Mediterráneo es un legado que se ha ido transmitiendo a lo largo de la historia. Egipcios, griegos, fenicios y romanos ya utilizaban el aceite de oliva para purificar su piel. Sabían que su valor oleico sobrepasaba su dimensión nutricional y por ello pasaron a emplearlo en su propio cuerpo.
Hoy en día, empresas dedicadas al aceite de oliva virgen extra como DOLIVA, han decidido contribuir a la expansión de ese legado que tantas civilizaciones han cuidado a lo largo de los siglos. Y es con ese recuerdo con el que ha decidido sacar entre su gama de productos cosméticos, un exfoliante corporal elaborado con el zumo y los huesos de la aceituna. Un remedio natural que otorga una extraordinaria suavidad a la piel y contribuye al rejuvenecimiento de sus células.
Al menos una vez en semana, es recomendable exfoliar la piel para así eliminar esas escamas o células muertas que se quedan como consecuencia del proceso natural al que está sometido el cuerpo. El uso de este tipo de aceites permite mejorar el aspecto de la piel dañada por el sol, reducir las arrugas, eliminar manchas e incluso mejorar el aspecto de aquellas imperfecciones que dejó el acné.
El aceite de oliva virgen extra con el que está elaborado el Exfoliante DOLIVA consigue no sólo una piel aterciopelada sino que además tonifica mejor por su contenido en ácidos grasos esenciales. Es un antioxidante natural que potencia el brillo, la suavidad y la elasticidad de la epidermis.
El uso de exfoliantes es sobre todo recomendable para pieles secas, de aspecto apagado o grisáceo. Con una emulsión del tamaño de una avellana del Exfoliante Doliva corporal son suficientes para mejorar el aspecto corporal. Se aconseja usarlo con la piel ligeramente humedecida y dando pequeños masajes circulares con suavidad.
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